Escrito por: Samuel Rafael
En la producción cinematográfica, el director de arte, es la persona encargada en generar de forma tangible la puesta en escena basándose completamente en la visión del director; y para llevar a cabo esta tarea de la mejor manera posible, esta persona tiene que tener bien presente tres aspectos: El color, la textura y la forma.
Si bien es cierto que antes de iniciar la producción de un largometraje o cualquier otro trabajo audiovisual, el director de arte investiga mucho acerca del lugar y el tiempo en donde se situará la obra, y sobre todo, estudia detenidamente el contexto histórico y social de dicho periodo. Pero, será con la ayuda del color, la textura y la forma con lo que se apoyará para llevar la época en la que se sitúa la historia y que esta ayude de forma narrativa a la película. Es decir, si comparamos dos películas que estén situadas en la misma época, nos daremos cuenta que aun así son muy diferentes si a lo visual se refiere, un claro ejemplo podría ser cuando vemos “Jojo Rabbit” (2019) dirigida por Taika Waititi; y comparamos su puesta en escena con “Inglourious Basterds” (2009) dirigida por Quentin Tarantino; ambas están situadas en la segunda guerra mundial pero por varias cuestiones narrativas estos tres elementos cambian mucho entre una película y otra.
En este artículo se hablará de la importancia que tiene la forma en un largometraje. La forma se refiere a la arquitectura que predominará en el film, ya que, aunque parezca imposible, esta nos dice demasiado sobre los personajes y la situación tanto emocional como social en la que se encuentran.
Un ejemplo claro de la importancia narrativa que puede tener la forma, se puede ver en el trabajo del director de arte Eugenio Caballero y su trabajo con Guillermo de Toro en la película “El laberinto del fauno” (2006). En este largometraje que tanto nos gusta, Eugenio separa el mundo real con el mundo fantástico apoyándose completamente en la forma, ya que mientras el mundo real está lleno de ángulos rectos y cuadrados enormes; por ejemplo los muebles, en este largometraje los muebles son exageradamente grandes en comparación con Ofelia, nuestra protagonista, y de esta manera nos dan a entender que para la niña, el mundo real es inaccesible, enorme y que simplemente no encaja en él y esto se logra solamente usando muebles grandes y líneas rectas, cosa que contrasta completamente con la otra parte de la película. Ya que por el otro lado, el mundo de la fantasía, en donde el fauno habita, está repleto de círculos esta tan cuidado ese aspecto que no se puede percatar ningún ángulo recto en el mundo fantástico.
Así mismo, se puede apreciar la misma intención con los colores y texturas que se aprecian en el filme de Guillermo del Toro, haciéndonos saber lo que está pasando en cada momento solo con la ayuda de la puesta en escena y recalcándolos las infinitas posibilidades que tiene un director de arte cuando se sabe utilizar tanto la forma como el color y la textura.