Dirección de arte: La textura

Escrito por: Samuel Rafael

Desapercibida, solo así se le puede nombrar, siempre oculta y casi invisible para mí, un simple espectador, ¿Cómo podría yo, testigo accidental de cierta película, ver la textura presente en la obra?  No sería lo adecuado, no lo merecería, más sin embargo se me permite sentirla, cosa que es lo más importante porque cuando de textura se habla, en el grado de relevancia no predomina lo que vemos si no lo que sentimos, es más importante lo que nuestras manos recordaron sentir a lo largo de nuestra vida intentando asimilar aquello a las texturas presentes en el film que lo que nuestros ojos nos muestran.

Misteriosa, la textura busca el mismo objetivo que la forma y el color, pero no lo hace como estos, se va a lo profundo, a lo intangible, a lo más raro y bello que tenemos nosotros, nuestras emociones y los recuerdos. Como ya se mencionó uno accede a las texturas por medio de las que en su tiempo ya percibió y tocó, de esa manera la textura presente en la obra nos muestra todo, desde las clases sociales, cultura, religión e historia de los personajes, hasta su psicología y emociones más profundas.

Incluso podría decirse que es hermoso la forma en que se nos muestra, algunos podrán percibirlo, otros no, la textura actúa como un ente selectivo, solo los que han vivido ciertas cosas, los que han sentido ciertas texturas y a su vez han sabido apreciarlas podrán presenciar lo que ella nos intenta decir.

 En el largometraje dirigido por Hirokazu Koreeda, “Dare mo shiranai” (2004), nos presenta el desapego que tuvo una madre al dejar a sus hijos solos en la ciudad y a cargo del departamento en donde viven, solo, abandonado y enojado, el hermano mayor, Akira, intentará con fracaso mantener unidos y sanos a sus hermanos. En este filme coreano el departamento, guarida y escondite de los niños funge como una visualización tangible a las emociones de los personajes por medio de muchas y cambiantes texturas; estable, limpio y ordenado cuando su madre esta, pero horrible, desordenado, con múltiples basuras, rayones y tierra cuando desaparece, no solo cambia el ambiente del hogar sino que se percibe más cerrado, las paredes que se muestran cuando la madre esta, son completamente lisas, a diferencia de cuando los niños se encuentran solos, en estos momentos las paredes se ven sucias, con rayones de crayolas o lápiz labial actuando así como texturas visuales espontáneas, las cuales son acompañadas por la textura táctil modificada, presente en las basuras que van dejando los niños.

La ciudad, grande y desconocida va cambiando poco a poco, atascada de texturas y edificios al inicio para mostrar el poder y misterio que esta representa en los niños hasta llegar a cielos completamente blancos, para visualizar el control ya adquirido por ellos e incluso esperanza en Akira de poder cumplir la secreta promesa que le hizo a su hermana pequeña antes de perecer. Tristes y solitarios los niños cambian de vida, ya no son niños, son sobrevivientes, su poca, pero algo acomodada vida se ha ido y con ella la ausencia de texturas, la ausencia de experiencias.

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